La mayorÃa de los concesionarios han cerrado por precaución y ante el hecho de que las caÃdas diarias de venta alcanzaron marcas del 96% en la primera semana de febrero.
La propagación del coronavirus está provocando un terremoto en la industria del automóvil. La mayorÃa de las fábricas en China han cerrado y las matriculaciones del primer mercado del mundo han colapsado en la primera quincena de febrero, con un descenso del 92%, según la China Passenger Car Association (CPCA).
En febrero de 2019 se vendieron 1,48 millones de autos en China. La CPCA afirma que "casi nadie" habÃa intentado comprar vehÃculos en febrero. Y aunque hubiesen querido, la mayorÃa de los concesionarios cerraron por precaución. Las caÃdas diarias tuvieron marcas del 96%, sobre todo en la primera semana del mes.
En la segunda, algunos establecimientos comenzaron a abrir sus puertas, con lo que las cifras de matriculaciones subieron. Cui Dongshu, secretario general de la CPCA, espera que la situación se normalice a final de este mes. Sin embargo, anticipa una bajada del 70%, con lo que se acumularÃa una caÃda del 40% en lo que llevamos de año.
Esto llevarÃa a China a tener el tercer descenso anual consecutivo en las ventas. A esto hay que añadirle la cancelación sin fecha del Salón del Automóvil de Beijing que iba a celebrarse del 21 al 29 de febrero.
Ante este panorama, Geely, matriz de Volvo, ha empezado a vender sus autos online con entrega a domicilio. BMW o Mercedes-Benz aumentaron sus promociones a través de internet, conscientes de la importancia de un mercado como China.
Según Bloomberg, el ministerio de Comercio de China prepara ayudas para revitalizar las ventas, en concreto las de los vehÃculos eléctricos. El gigante asiático es referente en esta materia pero ya en enero, con una crisis del coronavirus aún incipiente, las ventas de este tipo de vehÃculos alternativos cayeron 54%. El Gobierno chino querÃa prescindir de estas ayudas públicas para hacer menos dependiente el mercado.
En este contexto, Volkswagen decidió reanudar ayer la actividad de la mayorÃa de sus 33 fábricas después de mantenerlas cerradas durante más de dos semanas. El fabricante alemán planeó en principio que las plantas -tiene joint venture con SAIC y FAW- volviesen a operar el 17 de febrero. Retrasó el regreso por el agravamiento de la crisis, que provocó problemas en la cadena de suministro de piezas y en los desplazamientos de los trabajadores.
Otras compañÃas como la surcoreana Hyundai o las japonesas Honda y Nissan todavÃa no han vuelto a la plena actividad.
Fuente: Bloomberg