Un nuevo estudio revela que este tipo de automóviles pueden llegar a emitir tres veces más de lo que dicen las cifras oficiales. ¿La razón? Que sus propietarios no los enchufan y funcionan más tiempo con el motor de combustión.
Los autos hÃbridos enchufables son una de las soluciones por las que están apostando las marcas para reducir su media de emisiones, un término medio (tanto a nivel técnico como en volumen de emisiones homologadas) entre un hÃbrido convencional y un auto puramente eléctrico. Sin embargo, la realidad es que los llamados PHEV (por las siglas de 'Plug-in Hybrid Electric Vehicle) pueden ser una opción no tan buena como parecen.
En los últimos años han sido numerosos y reiterados los casos de fabricantes que, de alguna forma u otra, han mentido sobre las emisiones de sus autos -incluso en condiciones de homologación-. Se sabe que en condiciones reales las emisiones contaminantes de motores tanto gasolina como diésel son mucho mayores de las que homologan en laboratorio; y los hÃbridos enchufables, a priori mucho más limpios, también presentan un problema similar.
Según un estudio reciente, los hÃbridos enchufables contaminan hasta tres veces más de lo que dicen las cifras oficiales. La razón, por un lado, se debe al mayor peso añadido respecto a sus homólogos de gasolina: la baterÃa de los PHEV es mayor y notablemente más pesada que la de un hÃbrido convencional. La otra problemática tiene que ver con el uso que le dan sus propietarios, que en su mayorÃa no los enchufan y usan mayoritariamente el motor de combustión.
Un hÃbrido enchufable moderno puede recorrer entre 40 y 90 kilómetros en modo completamente eléctrico, por lo que podrÃa cubrir sin emisiones la mayorÃa de trayectos del dÃa a dÃa. No obstante, el estudio de The Miles Consultancy revela que el consumo de combustible resulta entre 2,5 y 3 veces superior al anunciado.
Dicho estudio tomó como muestra 187 automóviles hÃbridos enchufables de BMW, Mercedes, Mitsubishi y Volkswagen, resultando que el consumo medio real fue de 6,7 litros de combustible cada 100 km, frente a los 2,1 litros/100 km homologados de media.
El hecho de que los consumos de combustible (y, por tanto, las emisiones) sean hasta 3 veces superiores a la cifra oficial tiene mucho que ver con un uso incorrecto por parte de los propietarios, ya sea a propósito por desconocimiento. Pero también por el hecho de que las cifras oficiales son muy sensibles a cómo se cargan y conducen los hÃbridos enchufables, y de que las pruebas de homologación distan mucho de ofrecer resultados reales, incluso con el más reciente ciclo WLTP.
Por otro lado, cabe la posibilidad de que los conductores compren este tipo de vehÃculos con la buena intención de reducir las emisiones, pero el desconocimiento o la confusión con otras tecnologÃas les lleva a pensar que no hace falta enchufarlos. En cualquier caso, no es la primera vez que los hÃbridos enchufables están bajo la atenta mirada de las instituciones.
En el año 2018 un estudio realizado por investigadores noruegos concluyó que el promedio anual estimado de emisiones de CO2 de los hÃbridos enchufables era aproximadamente 2,5 veces mayor que el valor declarado en la prueba oficial de homologación.
Ese mismo año Francia retiró las ayudas a vehÃculos que emitiesen entre 21 y 60 g/km de CO2, que básicamente es muy parecido a decir que se las retiró directamente a los hÃbridos enchufables (los principales perjudicados por la medida).
En 2019 el gobierno británico se reafirmó en no volver a dar subvenciones para la compra de autos hÃbridos enchufables, y desde el propio Gobierno alegaron: "la evidencia era muy clara: los propietarios de hÃbridos enchufables no los estaban enchufando, con lo cual se anulaban los beneficios ambientales".
Fuente: The Miles Consultancy, HÃbridos y Eléctricos