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Fabricantes alemanes buscan clientes para autos eléctricos

Publicado 14 Mar 2019
Fabricantes alemanes buscan clientes para autos eléctricos


Las marcas alemanas, todavía con el fantasma del diéselgate acechándolas, saben que el camino es la electrificación de sus modelos, pero todavía les falta conquistar al público masivo.

Los fabricantes alemanes continúan apostando en los próximos años por vender millones de vehículos eléctricos, principalmente para evitar el pago de multas por no cumplir con las próximas normas europeas de emisiones. 

Las grandes automotrices presentaron en el Salón Internacional del Automóvil de Ginebra numerosos nuevos modelos híbridos y prototipos de autos eléctricos casi listos para ser producidos en serie. 

La cuestión es si el cliente estará dispuesto a comprarlos, y sobre esto los fabricantes tienen diversas expectativas. El tiempo apremia, ya que los nuevos límites de emisiones de dióxido de carbono fijados por la Unión Europea entrarán en vigencia en 2021. 

Los presidentes de BMW, Harald Krüger, y de Audi, Bram Schot, se mostraron optimistas en Ginebra. Quien alguna vez se sentó al volante de un vehículo eléctrico queda fascinado y ya no lo cambia, señaló Krüger. Según el ejecutivo, el 80% de los clientes quiere volver a adquirir un auto eléctrico.
 
BMW vende hoy en día el 9% de sus autos con propulsión híbrida o eléctrica, muchos de ellos en China. Pero en numerosos países de Europa este porcentaje no supera el 2% o 3%, observó Krüger.
 
Dado que adquirir un auto eléctrico es mucho más costoso, el fabricante tiene que convencer a los clientes paulatinamente con argumentos tales como la propulsión silenciosa, la enorme aceleración y los bajos costos de mantenimiento, destacó. 

"La reacción de los comerciantes y clientes es extremadamente positiva", comentó por su parte Schot. Audi quiere con su SUV Q4 e-tron hacer más accesible la conducción completamente eléctrica para un amplio espectro de clientes. El jefe de Audi presentó por primera vez en Ginebra un modelo próximo a la producción en serie que será fabricado a partir del año que viene. 

Daimler también continúa optimista respecto a cumplir con las normas más estrictas que regirán en Europa, pero esto también depende de los clientes, señaló el presidente de la junta directiva de la empresa, Dieter Zetsche, en el Salón de Ginebra. 

"Por supuesto, tenemos un plan sobre cómo lograr estas metas", comentó Zetsche. Daimler puede ser proactivo en lo que respecta a los vehículos, pero el grupo no tiene tanta influencia en el desarrollo de la infraestructura de carga para autos eléctricos o en la decisión de compra de los clientes, acotó el ejecutivo. 

Según Zetsche, la cuestión de los costos y su incidencia en los precios que los clientes tienen que pagar por un vehículo eléctrico también es importante. Daimler ya tiene un panorama concreto de cómo evolucionarán los precios hasta 2025, pero estas estimaciones son menos claras respecto a 2030. 

"Creo que en en las ofertas presentadas hasta ahora también es evidente que la electromovilidad es básicamente más costosa que los vehículos similares con motores de combustión", señaló Zetsche. Los vehículos eléctricos ofrecen ventajas en general y también para los clientes, pero a la vez tienen limitaciones, por ejemplo en cuanto a la autonomía, observó. 

El índice de dióxido de carbono de la flota de Daimler aumentó considerablemente en los últimos tiempos. El fabricante germano estima que el nivel de emisiones será ligeramente menor en 2019 y notablemente más bajo en 2020, en especial porque comenzará a producir de vehículos completamente eléctricos. El índice de flota de una marca indica el valor medio de dióxido de carbono por kilómetro emitido por todos los vehículos nuevos vendidos por un fabricante. 

En vísperas de la inauguración del Salón en la ciudad suiza, el grupo Volkswagen había anunciado que cooperará con el fabricante E.Go para el uso de su sistema modular para vehículos eléctricos. E.Go quiere aprovechar la tecnología del concepto modular de electrificación MEB de Volkswagen para equipar sus propios autos.
 
Los costos de la electromovilidad pueden reducirse en general si otros fabricantes también aprovechan el módulo de Volkswagen, indicaron. "El MEB debe convertirse en un estándar de la movilidad eléctrica", señaló Herbert Diess, presidente del grupo Volkswagen.
 
Los costos del desarrollo de nuevas tecnologías son enormes, por ejemplo la de los autos eléctricos o la conducción autónoma. Por eso los fabricantes tratan de compartir los gastos usando en lo posible la misma tecnología de base para diversos vehículos.
 
En 2020 y 2021 entrarán en vigencia normas ambientales más estrictas en la Unión Europea. Las automotrices corren el riesgo de tener que pagar altas multas si no logran reducir las emisiones de dióxido de carbono de sus vehículos. 

Esta es también una de las razones por las que los fabricantes invierten en modelos eléctricos. Volkswagen planea que el 25% de sus ventas en 2025 sean ingresados por el segmento de los vehículos eléctricos. 


Fuente: DPA

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